Cuando la normalidad aterra...

Han pasado cinco días desde que Tim K. se decidiera por el peor final para el último juego de su vida. Todavía nos preguntamos y seguiremos preguntado ¿por qué? Alemania está de duelo, absorta, muda, incrédula e impotente.

BBC Mundo en espanol (Clic aquí)
NZZ Nachrichten (Clic aquí)

Comentarios